¡QUE ÚTIL SABER DECIR QUE NO!
Queremos encontrarnos, abrazarnos, sentirnos libres y… ¡no podemos! Entonces sentimos ansiedad, tensión, angustia, temor, furia, y muchas veces no sabemos qué hacer con todas esas emociones. Transitamos #tiempos muy complejos, en los que la #agresividad y la #violencia están a flor de piel, y nos exigen descubrir cómo manejarlas. Seguro que en este mismo momento al leer decimos: ¿Agresividad? ¡Ay no…, yo no! La palabra misma nos choca, nos pone a la defensiva y por eso ¡cuánto esfuerzo ponemos muchas y muchos en impedirle su expresión natural! Paradójicamente la agresividad al igual que otras energías naturales tales como: la sexualidad, el deseo, la necesidad, el amor…, son las que permiten la #vida. Energías que no son buenas ni malas en sí mismas, de la misma manera que el agua no es buena ni mala en sí misma, puede calmar la sed o ahogarnos, todo depende….Es decir que las energías naturales pueden producir desastres o impedirlos. Pueden ayudarnos o destruirnos. Cada una d